La ascensión al Aspe, de 2 640 metros de altitud, por la arista de los Murciélagos es sin lugar a dudas la manera mas aérea de llegar a su cima. Larga aproximación desde Aisa o Candanchu pero con un paisaje digno de contemplar.
Primera ascensión de esta arista el 21 de septiembre de 1962 por Luis Alcalde, Manuel Ansón, Alberto Rabada y Julian Vicente, realizando la aproximación desde Candanchu.
Comienzo de la arista en travesía hacia la izquierda para afrontar la ascensión de la aguja Dondestastú, con una dificultad mantenida de III. Un rapel nos deposita en un pequeño collado a los pies de la segunda aguja conocida con el nombre Dondestánestos, varios clavos protegen el largo de IV grado, muy aéreo y continuo. Continuaremos por la arista hasta localizar un rapel de 18 metros que nos deja en un amplio collado que nos separa de la antecima del Aspe. Esta es la sección mas complicada de la arista con un paso aislado de V grado bastante aéreo, seguido de pasos aislados de III grado. Desde la antecima ya solo queda hacer un pequeño destrepe con posibilidad de montar un rapel y llegaremos directos a la cima principal con unas vistas panorámicas de lo mas espectaculares.
Aproximación: Se puede hacer desde Candanchu o como en este caso desde Aisa, dejando el vehículo en el parking de la Cleta. Desde el parking cogeremos el camino en sentido ascendente que enlaza con el sendero que asciende por el valle de Riguelo hasta el paso de la Garganta de Aisa, atravesaremos un gran caos de piedras y para terminar la penosa parte final con una interminable pedrera que nos deja en la base de la arista. 2 horas.
Descenso: Desde la cima del Aspe por el sendero de bajada hacia los llanos de Napazal, ruta normal de ascenso al Aspe. 1:30 horas.